Cuarenta y cinco a帽os despu茅s de su abandono, el generador de pulsos de radar Excalibur fue puesto de nuevo en funcionamiento. Originalmente construido para detectar a la nave alien铆gena Rama, que hab铆a visitado el sistema solar en 2132, el gigantesco radar hab铆a sido desactivado debido a una crisis econ贸mica. En aquel entonces, los cient铆ficos hab铆an concluido que Rama era una m谩quina sin inter茅s en la humanidad y, bas谩ndose en la ingenier铆a alien铆gena que lo creaba todo en tr铆os, predijeron la llegada de otras dos naves. Sin embargo, nunca aparecieron, y el incidente se desvaneci贸 en el pasado.
La reactivaci贸n del Excalibur, motivada por avances cient铆ficos, no ten铆a como prop贸sito principal la b煤squeda de alien铆genas. Aun as铆, la primera se帽al extra帽a apareci贸 casi sin que nadie se diera cuenta. Tras descartarla como un error, los operadores la detectaron de nuevo, y los cient铆ficos la confundieron con un cometa. Dos meses despu茅s, un estudiante demostr贸 que se trataba de un cuerpo liso de gran tama帽o. Para 2179, la noticia era oficial: una segunda nave extraterrestre, id茅ntica a la primera, se dirig铆a hacia la Tierra.
El mundo reaccion贸 con una mezcla de curiosidad y preocupaci贸n. La Agencia Espacial Internacional se prepar贸 para una misi贸n de intercepci贸n. Los viejos debates filos贸ficos sobre la existencia de vida inteligente resurgieron con fuerza, mientras la humanidad se preparaba para su segundo encuentro con el destino. Rama hab铆a vuelto.
En el simulacro de entrenamiento del Proyecto Newton, un equipo de tres personas —el ingeniero Janos Tabori, el piloto Hiro Yamanaka y el cient铆fico Dr. David Brown— se enfrentan a un desaf铆o complejo. A bordo de un helic贸ptero controlado remotamente, intentan capturar una criatura met谩lica con forma de armadillo que se arrastra por una pared vertical. Sin embargo, la inestabilidad del helic贸ptero dificulta la tarea, y las pinzas mec谩nicas no logran alcanzar el objetivo con la precisi贸n necesaria. La criatura avanza lentamente hacia un saliente en la pared, a punto de quedar fuera de su alcance.
Impulsado por el deseo de no fallar en la misi贸n, el Dr. Brown toma una decisi贸n arriesgada y ordena al piloto que desactive el sistema de control autom谩tico y opere en modo manual. A pesar de que la consola de vuelo muestra una advertencia cr铆tica por las tolerancias insuficientes para la maniobra, el piloto obedece, acercando con cautela el helic贸ptero a la pared. Aunque el ingeniero Tabori logra capturar la criatura con las pinzas, una repentina r谩faga de viento golpea la aeronave, desestabiliz谩ndola y haciendo que las aspas del rotor choquen estrepitosamente contra la pared. El da帽o es severo.
Ante la colisi贸n y el inminente fallo de la m谩quina, el sistema de emergencia se activa, y los tres tripulantes son eyectados del helic贸ptero, salv谩ndose con sus paraca铆das. Sin embargo, el agarre de las pinzas se relaja durante la eyecci贸n, y la criatura met谩lica cae cien metros, estrell谩ndose contra el suelo en miles de fragmentos. El helic贸ptero, severamente da帽ado, cae tambi茅n de forma err谩tica y se vuelca al aterrizar, marcando el fracaso rotundo de la misi贸n.
El general Valeriy Borzov, comandante del proyecto, llega a la zona y, con evidente frustraci贸n, confronta al Dr. Brown. La discusi贸n se centra en la imprudencia del cient铆fico al priorizar la captura del objetivo por encima de la seguridad de la tripulaci贸n. El general recuerda a Brown que las pol铆ticas del proyecto establecen la seguridad como la m谩xima prioridad en todo momento, especialmente en los simulacros. Acusa a Brown de haber puesto en riesgo las vidas de sus compa帽eros con una "locura" innecesaria, que result贸 en la destrucci贸n de un equipo valioso y en las lesiones de un miembro del equipo. Visiblemente furioso, el Dr. Brown ignora las recriminaciones, termina de empacar su paraca铆das y se aleja caminando, neg谩ndose a aceptar el transporte que se le ofrece y dejando claro su enfado y frustraci贸n.
Fuera de la sala de reuniones, Janos Tabori, el cosmonauta de origen h煤ngaro, es captado por la videoc谩mara de Francesca Sabatini, una periodista, quien lo entrevista sobre el reciente y desafiante ejercicio de simulaci贸n. Janos, con el hombro vendado, explica con detalle la dificultad que enfrentaron: el brazo mec谩nico ten铆a un alcance limitado para capturar un biot —una criatura biomec谩nica—, lo que los oblig贸 a tomar riesgos. El Dr. David Brown, decidi贸 acercar manualmente el helic贸ptero a la pared, momento en el que una r谩faga de viento los desestabiliz贸. Esta maniobra arriesgada casi termina en desastre, lo que justifica la lesi贸n de Tabori y el tono serio de la situaci贸n. Justo en ese momento, el General Michael Ryan O’Toole, un general de la fuerza a茅rea estadounidense, interrumpe para urgirlos a entrar a la reuni贸n, donde el Coronel Borzov, el comandante de la misi贸n, los espera impaciente. Francesca, la periodista, bromea con Janos, refiri茅ndose a 茅l como su "h茅roe h煤ngaro" mientras le da unas palmaditas de consuelo. Reggie Wilson, un periodista estadounidense, se une a ellos, tomando notas en un peque帽o teclado y susurr谩ndole a Tabori su intenci贸n de escribir un reportaje sobre la tecnolog铆a de teleoperaci贸n del brazo y el guante rob贸tico, un tema que, seg煤n 茅l, fascinar谩 a sus lectores.
Una vez dentro, el comandante Borzov rega帽a al equipo por su falta de concentraci贸n y su bajo rendimiento en los ejercicios. Con un tono sarc谩stico y una voz que resuena en la sala, se帽ala directamente a Wilson, critic谩ndolo por priorizar su labor period铆stica sobre su deber como miembro de la tripulaci贸n. Borzov les exige que dejen de lado las distracciones, ya que se acercan a un momento crucial: el encuentro con la nave Rama. Les recuerda que no se trata de una misi贸n menor, sino posiblemente de la m谩s importante de todos los tiempos. Les reprocha que su actuaci贸n ha sido "absolutamente abominable" y expresa su frustraci贸n ante la aparente falta de preparaci贸n de algunos, que ni siquiera leen los protocolos y procedimientos, una obligaci贸n que aceptaron al unirse a la misi贸n. Les recalca que el conocimiento de estos protocolos debe ser perfecto y autom谩tico para que sus cerebros puedan estar libres y listos para cualquier imprevisto. Les recuerda que las prioridades son, primero, la seguridad de la tripulaci贸n y, segundo, la determinaci贸n de cualquier amenaza para la Tierra. Solo despu茅s de cumplir esos dos puntos, la captura de biots puede ser considerada.
En un giro inesperado, el Dr. David Brown interrumpe a Borzov para defender sus acciones, argumentando que las prioridades no deben aplicarse de forma tan r铆gida y secuencial. 脡l sostiene que la captura de biots es de suma importancia para la comunidad cient铆fica, una oportunidad que no se puede desaprovechar. Brown explica que, si bien la primera nave Rama era pasiva, solo se consigui贸 un 煤nico artefacto y una disecci贸n incompleta de una de sus criaturas. Insiste en que la posibilidad de traer de vuelta varios biots y desentra帽ar sus secretos podr铆a significar el primer contacto real con una cultura extraterrestre, un hito que cambiar铆a la historia de la humanidad. Borzov, aunque visiblemente impresionado por la elocuencia de Brown, insiste en que la seguridad es lo primordial. Richard Wakefield, un cosmonauta brit谩nico, apoya a Brown, planteando un punto fascinante y crucial: ¿qu茅 pasar铆a si la segunda nave Rama, a diferencia de la primera, no es pasiva? Advierte que no se puede predecir la reacci贸n de los biots ante un acto hostil, y que un intento de captura podr铆a desencadenar un cambio en el funcionamiento de toda la nave. Finalmente, Janos Tabori, con un toque de humor, pide el fin de la reuni贸n, argumentando que est谩 exhausto y hambriento. Borzov accede, concluyendo la sesi贸n y record谩ndoles que las dos semanas de simulaciones que les quedan son su 煤ltima oportunidad para prepararse antes de que comiencen las actividades de prelanzamiento. La tripulaci贸n, que incluye a los pilotos Irina Turgenyev, y Hiro Yamanaka, el cient铆fico Shigeru Takagishi, la oficial de ciencias de la vida Nicole des Jardins, y el Almirante Otto Heilmann, se prepara para un merecido descanso.
La llegada de la primera nave extraterrestre, Rama, a principios de 2130, conmocion贸 a la humanidad. Por primera vez se ten铆a la prueba de que no estaban solos en el universo, un hecho que oblig贸 a la raza humana a reconsiderar su lugar en el cosmos. La nave se march贸 tan misteriosa y r谩pidamente como lleg贸, dejando a un mundo expectante que pronto se dio cuenta de que el contacto hab铆a terminado. La amenaza percibida se desvaneci贸 y la euforia dio paso a un comportamiento narcisista y consumista sin precedentes. La humanidad se lanz贸 a un frenes铆 de autoindulgencia, aprovechando el momento como si fuera el 煤ltimo, lo que se conoci贸 como el "Boom Ramano".
Este auge econ贸mico desmesurado, que dur贸 poco menos de dos a帽os, ocult贸 las debilidades subyacentes del sistema financiero global. A medida que el gasto se disparaba y la producci贸n crec铆a, algunos expertos advirtieron del peligro de una inminente cat谩strofe. Sin embargo, los l铆deres mundiales y la poblaci贸n general, confiados en una prosperidad que cre铆an eterna, ignoraron las se帽ales de alarma. El mercado de valores comenz贸 a decaer a principios de 2134, coincidiendo de forma inquietante con la aparici贸n extraordinariamente brillante del cometa Halley.
La crisis estall贸 el 1 de mayo de 2134, cuando la insolvencia de tres grandes bancos desat贸 un p谩nico mundial. Las personas se apresuraron a liquidar sus activos en una sobrecarga masiva del sistema de red global. Esto provoc贸 un colapso en la transferencia de datos y, por consiguiente, una interrupci贸n del sistema financiero electr贸nico que dur贸 tres semanas. Sin dinero en efectivo ni acceso a sus cuentas, la gente recurri贸 al trueque para sobrevivir. Aunque el sistema se restableci贸 tras meses de esfuerzos, la econom铆a mundial entr贸 en una violenta recesi贸n que durar铆a m谩s de una d茅cada y cuyas consecuencias tardar铆an cincuenta a帽os en recuperarse. La visita de Rama, lejos de iniciar una era de iluminaci贸n, hab铆a desencadenado el mayor colapso econ贸mico de la historia.
Hubo un acuerdo general en que el Gran Caos, la cat谩strofe que alter贸 la civilizaci贸n, fue desencadenado por el desplome del mercado y la quiebra del sistema financiero global. Sin embargo, lo que realmente sumi贸 al mundo en una depresi贸n sin precedentes fue una serie de decisiones desorganizadas y equivocadas de los l铆deres pol铆ticos. Estos l铆deres, en lugar de coordinar una respuesta global, priorizaron las necesidades de sus propias naciones, lo que llev贸 al fracaso de las soluciones internacionales. Este colapso evidenci贸 un grave defecto en la globalizaci贸n del siglo XXI: las naciones pod铆an retirarse de los acuerdos internacionales con poca antelaci贸n, socavando la estabilidad de las instituciones conjuntas.
Este caos financiero coincidi贸 con un per铆odo de cambios dr谩sticos. Despu茅s de que el encuentro con la primera nave Rama en 2130 desvi贸 fondos a proyectos espaciales de emergencia y los recortes de impuestos redujeron a煤n m谩s los presupuestos, las nuevas instituciones internacionales se volvieron ineficientes. El desplome del mercado, en un entorno de desconfianza p煤blica en estas organizaciones, se agrav贸. En un intento por sobrevivir, las naciones individuales dejaron de contribuir a las mismas entidades globales que podr铆an haber evitado el desastre. La consecuencia fue una ola de desempleo y quiebras, que r谩pidamente escal贸 a una crisis humanitaria con millones de personas sin hogar y hambrientas. Las ciudades se llenaron de comunidades de tiendas de campa帽a que se convirtieron en entidades permanentes, creando una tensi贸n latente de anarqu铆a.
Un breve rayo de esperanza apareci贸 en 2138 con un joven novicio franciscano llamado Michael Balatresi, conocido como San Miguel de Siena. Su mensaje religioso uni贸 a una gran cantidad de personas de todas las fronteras, amenazando a los l铆deres establecidos del mundo con su llamado a una respuesta colectiva. Sin embargo, su martirio ese mismo a帽o destruy贸 la 煤ltima chispa de optimismo. El mundo se sumergi贸 en cuatro a帽os de anarqu铆a, hambruna, enfermedad y conflictos. Las instituciones se desintegraron y la vida se volvi贸 ca贸tica para la mayor铆a, con la excepci贸n de unos pocos privilegiados. El Gran Caos tambi茅n golpe贸 a las colonias espaciales, que depend铆an de los suministros de la Tierra. El flujo de dinero se detuvo y las condiciones de vida se deterioraron, obligando a casi la mitad de los colonos a regresar a un planeta en crisis.
Para 2145, el mundo, al borde de la desintegraci贸n, comenz贸 a reconocer la importancia de la cooperaci贸n internacional. Los individuos m谩s talentosos se unieron en esfuerzos cooperativos para restaurar la civilizaci贸n. La recuperaci贸n fue dolorosamente lenta, pero las instituciones internacionales se revitalizaron. La poblaci贸n mundial se redujo en casi mil millones debido a la alta tasa de mortalidad y la baja natalidad. La generaci贸n que creci贸 durante el Caos se volvi贸 extremadamente cautelosa y estricta con sus hijos, inculc谩ndoles la idea de que la vida era un asunto serio que requer铆a autocontrol y compromiso.
Para la d茅cada de 2170, la sociedad era radicalmente diferente, con un renacimiento de instituciones antiguas como los estados-naci贸n y la Iglesia Cat贸lica. El inter茅s en el espacio resurgi贸, y se lanzaron nuevos sat茅lites y se planificaron misiones tripuladas para la d茅cada de 2190. Aunque el desarrollo tecnol贸gico era similar al de 2130, la sociedad de finales del siglo XXII estaba m谩s avanzada en 谩reas como la medicina. Sin embargo, la diferencia m谩s notable era la mentalidad de los l铆deres. Muchos de ellos hab铆an vivido el Gran Caos y conoc铆an el miedo, una experiencia que dar铆a forma a sus decisiones al enfrentarse a la segunda nave extraterrestre, Rama II.
En una entrevista para un documental, Francesca Sabatini, una periodista de renombre, interroga a Elaine Brown, esposa del famoso f铆sico Dr. David Brown, sobre su relaci贸n y el trabajo de su marido. La entrevista se desarrolla en el sal贸n de la pareja y Francesca, con su sonrisa y belleza, contrasta con la rigidez y nerviosismo de Elaine. El punto de tensi贸n se centra en la 茅poca en que David era director de tesis de Elaine y a煤n estaba casado con su primera esposa, un hecho que Elaine admite con cierta torpeza.
La escena toma un giro cuando la entrevista concluye y el equipo de producci贸n, con sofisticadas c谩maras rob贸ticas, comienza a desmontar. Francesca se da cuenta de que tiene el material que necesita, revelando que Elaine es una mujer poco c贸moda con la atenci贸n medi谩tica y que su relaci贸n con David parece tensa. Mientras Elaine invita al equipo a una peque帽a celebraci贸n, Francesca sigue a David a un pasillo para discutir un negocio pendiente, un proyecto con los financieros Schmidt y Hagenest. La conversaci贸n revela la necesidad de control de David y su frustraci贸n por no poder supervisar lo que su esposa e hijos dicen a los periodistas.
De pronto, un grito interrumpe la calma. El hijo peque帽o de la pareja, Justin, acusa a Reggie, el compa帽ero de Francesca, de haber roto su perro robot. La hija adolescente, Angela, interviene para defender a Reggie, explicando que el perro robot, programado por Justin para hacer travesuras, mordi贸 a Reggie despu茅s de orinarle encima. La discusi贸n se intensifica, mostrando la disfuncionalidad familiar y el enojo desmedido de David. Ante la escena, Francesca observa con inter茅s, sintiendo que la situaci贸n es ideal para sus prop贸sitos, ya que la incomodidad de David lo har谩 m谩s f谩cil de manipular para su plan.
M谩s tarde, en su viaje de regreso en un tren supers贸nico, Francesca recibe el elogio de un fan, lo que demuestra su popularidad. Su compa帽ero Reggie reflexiona sobre la fama de Francesca, mientras ella lo considera demasiado absorto en s铆 mismo para entender su ambici贸n. Ya en el hotel, Francesca activa su terminal de computadora y maneja mensajes cruciales. Rechaza airadamente una oferta de publicidad de Carlo Bianchi, un antiguo conocido que la ha disgustado, y planea una nueva colaboraci贸n con la competencia. Tambi茅n recibe un mensaje de su marido, Alberto, que le ofrece apoyo y un sentido de seguridad que ella aprecia.
Finalmente, Francesca fuma en el balc贸n, contemplando su siguiente gran paso profesional: un proyecto de asociaci贸n con David Brown. Su mente fantasea con las implicaciones c贸smicas de su misi贸n, pero pronto vuelve a la realidad de su plan. Un destello de inter茅s en los ojos de David durante la firma de los contratos la hace pensar en algo m谩s que negocios. Al regresar a su habitaci贸n, encuentra a Reggie dormido y reflexiona sobre la falta de sutileza en 茅l, en contraste con su propia ambici贸n y meticulosa planificaci贸n.
En la Florida del a帽o 2199, el antiguo puerto espacial Kennedy, una vez abandonado, hab铆a resurgido de las cenizas del "Gran Caos" para convertirse en un bullicioso centro de transporte. Desde una de las oficinas del complejo, el general Valeriy Borzov, un hombre fascinado por las aves desde su infancia, observa su entorno. Mientras ve un m贸dulo de propulsi贸n ser transportado para pruebas, el general espera la llegada de Francesca Sabatini, una ex modelo y ahora periodista que ha solicitado verlo en privado antes de una reuni贸n crucial.
Francesca, una mujer elegante con una blusa de rayas que a Borzov le recuerda a un tigre, confronta al general con la agenda de prensa de la misi贸n, expresando su frustraci贸n porque varias entrevistas con los cosmonautas no se han podido realizar debido a una simulaci贸n extra que 茅l a帽adi贸. Le pide que la cancele y que tanto 茅l, como Nicole des Jardins, una cosmonauta muy popular pero reacia a los medios, concedan entrevistas. Borzov, molesto por la intrusi贸n, intenta cambiar de tema, mencionando su preocupaci贸n por la excesiva ostentaci贸n de una fiesta de Nochevieja organizada por los contactos de Francesca en Italia, a la que varios cosmonautas se niegan a asistir.
La periodista, sin inmutarse, le revela al general que el tema de la fiesta tambi茅n estaba en su agenda y le pide su ayuda para asegurar la asistencia de los cosmonautas. Borzov, al notar su insistencia, presiente que hay algo m谩s detr谩s de la conversaci贸n. En ese momento, Francesca le entrega un peque帽o cubo de datos. Al insertarlo en su computadora, el general ve un video de su hija, Natasha, que sufre de esquizofrenia. Francesca, con una mezcla de seriedad y astucia, le confiesa que la cinta tiene una duraci贸n de media hora y que solo ella ha visto el contenido completo.
Consciente de las implicaciones de que la enfermedad de su hija se haga p煤blica, Borzov eval煤a r谩pidamente la situaci贸n. Odia hacer tratos, pero comprende la gravedad del asunto. Finalmente, cede, aceptando cancelar la simulaci贸n extra y comprometi茅ndose a hacer su entrevista personal. Tambi茅n se compromete a hablar con los dem谩s cosmonautas sobre su deber de asistir a la fiesta. Sin embargo, se mantiene firme en que no puede obligar a Nicole des Jardins a hablar con la prensa. Con el trato sellado, ambos se dirigen a su reuni贸n.
En un peque帽o auditorio, un grupo de cosmonautas, ingenieros y reporteros se reuni贸 para una sesi贸n informativa m茅dica. La oficial de ciencias de la vida, Nicole des Jardins, y el Dr. Toshiro Hakamatsu, se preparaban para presentar un revolucionario sistema de biometr铆a. El doctor, un genio japon茅s, hab铆a dise帽ado un sistema de min煤sculas sondas que se insertan en el cuerpo para monitorear la salud de los tripulantes de la misi贸n. A diferencia de las exploraciones m茅dicas tradicionales, estas sondas permanecen en el cuerpo, simplificando el control de la salud en la inmensidad del espacio.
Hakamatsu dise帽贸 el sistema de sondas para que cada una se adaptara a la qu铆mica corporal del anfitri贸n, evitando el rechazo inmunol贸gico a largo plazo. Una vez inyectadas en el brazo, las treinta y dos sondas se dispersan a lugares espec铆ficos del cuerpo, como el cerebro, el coraz贸n y las gl谩ndulas. Cada una est谩 equipada con sensores y un sistema de almacenamiento de datos. Nicole explic贸 que un esc谩ner se usar铆a para descargar la informaci贸n de salud una vez al d铆a, aunque el sistema pod铆a guardar hasta cuatro d铆as de datos.
El sistema de biometr铆a no solo recopila billones de datos, sino que los analiza autom谩ticamente para detectar irregularidades. Si una lectura excede el rango esperado, la sonda env铆a una advertencia. Si la lectura sobrepasa el rango de tolerancia, indica una emergencia, y el monitor emite un fuerte sonido. Nicole asegur贸 que las sondas se calibrar铆an individualmente para cada cosmonauta, bas谩ndose en sus historiales m茅dicos y en los datos recopilados durante las simulaciones finales.
Al abordar las preocupaciones de los tripulantes, Nicole aclar贸 que cada sonda tiene un programa de gu铆a que asegura que llegue a su destino. Si una sonda se desv铆a, se puede corregir con comandos. Para cualquier posible mal funcionamiento, las sondas tienen mecanismos de seguridad que les permiten autodestruirse y ser reabsorbidas por el cuerpo de manera inofensiva. Despu茅s de su presentaci贸n, Nicole pidi贸 un voluntario para ser inoculado con el nuevo sistema. Francesca Sabatini se ofreci贸, y la audiencia observ贸 en la pantalla una simulaci贸n de los "insectos electr贸nicos" dispers谩ndose por el torrente sangu铆neo.
Nicole estaba en un vuelo supers贸nico hacia Jap贸n. Se dirig铆a all铆 por un descubrimiento que hab铆a hecho veinticuatro horas antes, mientras revisaba datos de simulaciones. Hab铆a notado una anomal铆a en la biometr铆a card铆aca de su colega, el cient铆fico japon茅s Shigeru Takagishi. Su "expansi贸n diast贸lica", una fase del latido, era irregular y parec铆a patol贸gica. Lo m谩s intrigante era que el sistema de monitoreo, dise帽ado por el Dr. Hakamatsu, no hab铆a emitido ninguna alarma, un fallo que la desconcertaba.
Despu茅s de investigar m谩s a fondo, Nicole llam贸 a Hakamatsu, quien le asegur贸 que su sistema no pod铆a fallar de esa manera y sugiri贸 que el problema era del paciente. La situaci贸n tom贸 un giro inesperado cuando se revel贸 que el paciente era su compatriota, el Dr. Takagishi. Hakamatsu se emocion贸, pensando que por fin podr铆a resolver el misterio, y se ofreci贸 a contactar a Takagishi para aclararlo. Sin embargo, poco despu茅s, fue el propio Takagishi quien se comunic贸 con Nicole, revelando un rostro sombr铆o. El cient铆fico japon茅s le pidi贸 que fuera a Jap贸n con urgencia para hablar en persona sobre un asunto de suma importancia.
Al encontrarse en Kioto, Takagishi le revel贸 la verdad. 脡l era un gran admirador de la nave Rama y su regreso. Para ser seleccionado en la misi贸n, hab铆a falsificado su historial m茅dico y hab铆a usado un f谩rmaco experimental para ocultar su irregularidad card铆aca. El monitoreo semanal no hab铆a detectado nada, pero el nuevo sistema permanente de sondas Hakamatsu era infalible. Takagishi le explic贸 que hab铆a enga帽ado al sistema introduciendo rangos de valores esperados que no activar铆an las alarmas de su coraz贸n. Ahora, se ve铆a en un dilema: no quer铆a abandonar la misi贸n, especialmente porque cre铆a que sus colegas, Brown y Heinrich, ignorar铆an la pista que 茅l podr铆a descubrir.
Nicole se encontr贸 en una dif铆cil encrucijada. No quer铆a encubrir a Takagishi, pero tambi茅n simpatizaba con su pasi贸n y entend铆a la rigidez del equipo m茅dico del proyecto, que ya hab铆a descalificado a un cosmonauta con un soplo menor. Despu茅s de pensarlo, Nicole acept贸 ayudar a Takagishi. Ir铆a con 茅l a ver a su m茅dico para examinar todo su historial m茅dico y, si todo estaba en orden, se llevar铆a los archivos a casa para estudiarlos detenidamente. Sin embargo, le advirti贸 que si encontraba algo sospechoso, le pedir铆a que renunciara de inmediato.
El general O'Toole se encuentra en una antesala del Vaticano, a punto de ser recibido por el Papa Juan Pablo V, a pesar de su nerviosismo, reflexiona sobre su vida y las pasiones que lo llevaron hasta all铆: la religi贸n, la historia y la f铆sica. Siempre le fascin贸 el concepto de la creaci贸n, y c贸mo la ciencia y la fe se relacionan, a pesar de sus aparentes contradicciones. De adolescente so帽aba con ser Papa, pero decidi贸 que su vocaci贸n no le permitir铆a explorar libremente la verdad cient铆fica. Ahora, el prop贸sito de su visita es precisamente abordar estas cuestiones teol贸gicas antes de embarcarse en una misi贸n crucial para la humanidad: un encuentro con una nave espacial alien铆gena.
Durante la audiencia, O'Toole le plantea al Pont铆fice su inquietud sobre la redenci贸n de los Ramanes, los seres que construyeron la nave. Acepta que Dios pudo haberlos creado, pero se pregunta si estos seres tambi茅n cometieron un pecado original y si, por lo tanto, necesitaron un salvador. El General plantea la posibilidad de que la historia de Jes煤s no sea exclusiva de la Tierra, sino parte de una narrativa universal de salvaci贸n. El Papa, que ha estado investigando el tema, le responde que, aunque la Iglesia a煤n no tiene respuestas definitivas, 茅l cree firmemente que Jes煤s es el 煤nico salvador, y que de haberlo necesitado, 脡l tambi茅n habr铆a sido enviado a los Ramanes, aunque de forma diferente.
O'Toole se siente reconfortado por la respuesta, viendo en esta idea un lazo espiritual que une a toda la inteligencia en el universo. Menciona al Papa que, si los Ramanes tambi茅n fueron salvados, esto har铆a de la humanidad y de ellos hermanos espirituales. Luego critica la interpretaci贸n de algunos te贸logos que limitan el papel de los Ramanes. El Papa se muestra complacido por el profundo inter茅s teol贸gico del General, el cual no constaba en su expediente. O'Toole le explica que su inter茅s surge del deseo de servir a la humanidad y a Dios de la mejor manera posible durante su misi贸n. El Papa concluye la conversaci贸n revelando que uno de sus arzobispos cree que la nave alien铆gena, por su simetr铆a y dise帽o, podr铆a ser un templo, una idea que asombra a O'Toole, pues contradice la visi贸n de uno de sus colegas cient铆ficos que descarta toda posibilidad de que los Ramanes tengan una religi贸n. El Papa le dice a O'Toole que esta nave podr铆a ser un mensajero de Dios y que su misi贸n es discernirlo. O'Toole se despide, agradecido y honrado por la sabidur铆a compartida, con la certeza de que Dios lo ha elegido para esta tarea.
El general O’Toole, se encuentra en Roma para una peregrinaci贸n personal que lo lleva al impresionante santuario de San Miguel de Siena. Este lugar sagrado no es una simple edificaci贸n, sino un testamento de la historia reciente de la humanidad, construido en el exacto epicentro de un holocausto nuclear que asol贸 la ciudad. Al entrar, O'Toole observa que el santuario se integra de manera arm贸nica en el antiguo Parque Internacional de la Paz, que se extiende entre las ruinas de los foros romanos y el Coliseo, creando un fascinante contraste entre lo viejo y lo nuevo, la destrucci贸n y la reconstrucci贸n.
El santuario en s铆 es una maravilla arquitect贸nica y simb贸lica. En su primera planta, dedicada a la meditaci贸n, se refleja la visi贸n inclusiva de San Miguel. O'Toole ve c贸mo esta zona de culto est谩 dividida en doce capillas, seis de las cuales siguen motivos cat贸licos, mientras que las otras seis rinden homenaje a las principales religiones del mundo. Este dise帽o ecl茅ctico fue concebido para honrar la memoria del santo, una figura amada que trascendi贸 las barreras religiosas. El general, aunque solo pasa un momento en este nivel, se arrodilla brevemente en una capilla cat贸lica y observa una escultura de madera de Buda, reconociendo la universalidad del mensaje que San Miguel predic贸.
Lo m谩s impactante del santuario reside en la segunda planta, donde una serie de doce frescos inigualables narran la vida de San Miguel. O'Toole alquila una audiogu铆a y se sumerge en la historia contada en las pinturas, cada una de seis metros de altura. Los frescos no solo son obras de arte, sino ventanas a una vida extraordinaria. Comienzan con el misterioso nacimiento de Miguel en la v铆spera de Navidad, dejado en una iglesia de Siena, y contin煤an a trav茅s de sus a帽os de formaci贸n, su activismo incansable para ayudar a los desamparados y su predicaci贸n sobre la unidad humana. Una de las pinturas m谩s dram谩ticas lo muestra en un estudio de televisi贸n, donde, en ocho idiomas, propaga su mensaje a un mundo roto. Otro fresco de gran maestr铆a retrata su tenso enfrentamiento con el viejo papa, un choque entre el idealismo juvenil y el cansancio institucional.
La historia de los frescos alcanza un punto cumbre con la representaci贸n de los milagros y las tribulaciones de Miguel. El noveno panel es un milagro conocido por miles de millones: Miguel, predicando bajo la lluvia en las orillas del lago de Bolsena, permanece seco mientras la lluvia empapa a la multitud, con un halo de luz solar que lo ilumina. Tras este evento, sin embargo, su vida se deteriora r谩pidamente, enfrentando la p茅rdida de sus licencias de televisi贸n y una campa帽a de desprestigio en los medios, hasta un intento de asesinato. La historia que cuenta el santuario es una advertencia sobre c贸mo el poder y la popularidad pueden generar miedo, incluso cuando se basan en la bondad.
El recorrido del general O’Toole alcanza su cl铆max emocional al llegar a los 煤ltimos dos frescos, los m谩s significativos para 茅l. El d茅cimo panel muestra a San Miguel en la c煤spide de su influencia, predicando ante casi un mill贸n de personas en la Piazza Venezia. Un mar de t煤nicas azules y rostros llenos de esperanza llenan la pintura, un s铆mbolo de la unidad que Miguel hab铆a logrado. Inmediatamente al lado, el und茅cimo fresco retrata la misma escena una hora despu茅s, pero esta vez, la vida ha sido reemplazada por la devastaci贸n. En el centro de la pintura hay un gran agujero, el lugar donde la bomba nuclear estall贸, vaporizando al santo, a la plaza y al inmenso monumento. Solo los bordes del epicentro muestran escenas de agon铆a que sacuden el alma. El general, un hombre acostumbrado al rigor, se derrumba de rodillas, conmovido hasta las l谩grimas por la cruda realidad del sacrificio de Miguel y de aquellos que lo siguieron. Llorando, eleva una oraci贸n, pidiendo a Dios que le conceda la sabidur铆a para entender el significado del mensaje de San Miguel, antes de emprender su propia misi贸n crucial como emisario ante los Ramanes.
Nicole des Jardins se est谩 preparando para asistir a la fiesta de A帽o Nuevo en Roma, espec铆ficamente en la Villa de Adriano. Antes de irse, se comunica por videotel茅fono con su hija Genevieve y su padre Pierre, quienes est谩n en casa. Ambos la halagan por su vestido y peinado, lo cual es inusual para ella. Nicole confiesa que se siente nerviosa, ya que a menudo se siente inc贸moda en grandes eventos sociales, y tiene una extra帽a sensaci贸n de premonici贸n, parecida a la que sinti贸 antes de la muerte de su perro en la infancia. Su padre le aconseja que se quede en el hotel, pero Nicole decide asistir de todos modos.
Una vez en la fiesta, que se celebra en una r茅plica del Teatro Mar铆timo de Adriano, Nicole y su compa帽ero cosmonauta Hiro Yamanaka son asediados por la prensa y la multitud. Logran escapar en un carrito el茅ctrico que los lleva a trav茅s de las ruinas de la villa, mientras la gu铆a les da una lecci贸n de historia. Nicole se impresiona por la inmensidad del lugar y recuerda la historia del emperador Adriano. Al llegar a la fiesta, se siente abrumada por la atenci贸n y las conversaciones superficiales, a pesar de los intentos de algunas personas por entablar contacto con ella.
Finalmente, Nicole se sienta sola para comer, tratando de recuperar la calma. Lee un art铆culo de la revista Italia sobre su compa帽era Francesca Sabatini, quien la describe como una mujer que "ha suprimido a prop贸sito su feminidad". Esto la divierte, pero tambi茅n le hace sentir curiosidad. M谩s tarde, se encuentra con Richard Wakefield, otro cosmonauta, que est谩 visiblemente ebrio. 脡l le dice que el lugar le resulta familiar y, en un momento de lucidez, se da cuenta de que la disposici贸n del Teatro Mar铆timo de Adriano, con su isla y su mar circular, es una r茅plica a peque帽a escala de la nave alien铆gena Rama. Richard exclama que la clave de esta conexi贸n no es la naturaleza o la cultura, sino las matem谩ticas, ya que tanto los romanos como los Ramanes debieron entender los mismos principios matem谩ticos para construir sus estructuras. En un tono enigm谩tico, Richard une a los "Ramanes y Romanos", sugiriendo un v铆nculo enigm谩tico entre ambas civilizaciones a trav茅s del lenguaje universal de las matem谩ticas.
Durante la lujosa gala de A帽o Nuevo en Italia, Nicole se encontr贸 en una serie de eventos inesperados. Despu茅s de un espect谩culo de delfines y una fascinante demostraci贸n cient铆fica sobre la inteligencia, conoci贸 a Julien LeClerc, un famoso cantante franc茅s que la invit贸 a bailar. A pesar de su inicial renuencia, Nicole acept贸, y en la pista de baile, se encontraron con Francesca Sabatini, la anfitriona del evento.
Francesca, una periodista muy h谩bil, invit贸 a Nicole a una entrevista improvisada en un estudio temporal montado en la misma fiesta. Aunque una voz interior le advirti贸 que no lo hiciera, Nicole accedi贸, impulsada en parte por el consejo de Julien de mostrarse como una mujer "normal". La entrevista comenz贸 de manera fluida y superficial, cubriendo temas como su entusiasmo por la misi贸n del Rama II y su carrera. Sin embargo, el tono cambi贸 abruptamente cuando Francesca le hizo una pregunta extremadamente personal sobre la paternidad de su hija, Genevieve. Esta invasi贸n a su privacidad desat贸 una oleada de dolor y recuerdos que Nicole no pudo contener. En un intento por recuperar el control, se oblig贸 a s铆 misma a levantarse y abandonar la entrevista, poniendo fin de manera abrupta a la conversaci贸n y a su presencia en el evento.
A partir de ese momento, la noche se volvi贸 ca贸tica. Julien la intercept贸, y en medio de un inmenso revuelo, la bes贸 apasionadamente mientras los fot贸grafos capturaban el momento. Simult谩neamente, un altercado estall贸 entre el cient铆fico David Brown y Reggie Wilson, supuestamente una confrontaci贸n orquestada por Francesca, que culmin贸 con la intervenci贸n de los guardias de seguridad. Nicole, confundida y abrumada, observ贸 la escena como si fuera una espectadora, luchando por entender lo que estaba pasando.
Finalmente, Nicole escap贸 de la fiesta y se dirigi贸 a su hotel, convencida de que los eventos ca贸ticos de la noche, incluido su propio descontrol emocional, hab铆an sido provocados por algo en las trufas de chocolate que Francesca le hab铆a ofrecido. Su sospecha se centr贸 en la anfitriona, a la que consideraba la mente maestra detr谩s de todo el drama. Pero la noche a煤n no hab铆a terminado. De vuelta en su habitaci贸n, un misterioso anciano apareci贸 en la puerta. Se present贸 como Omeh, su bisabuelo, y cham谩n de la tribu Senoufo de su madre. Le dijo que hab铆a sentido el peligro que la acechaba y se dirigi贸 a ella por su nombre en el idioma de su tribu: Ronata. Como un protector de otra 茅poca, le entreg贸 un frasco con agua sagrada del "Lago de la Sabidur铆a" y una piedra pulida, advirti茅ndole que estas ser铆an sus 煤nicas protecciones en el futuro. Tras cumplir su misi贸n, desapareci贸 tan misteriosamente como hab铆a llegado. Nicole se qued贸 sola, con un profundo sentimiento de asombro y las enigm谩ticas reliquias en su mano, enfrent谩ndose a un futuro que parec铆a mucho m谩s complicado de lo que hab铆a imaginado.
A lo largo del g茅lido paisaje de Davos, Nicole y su hija Genevieve caminaban, unidas por lazos familiares y un futuro incierto. Genevieve, orgullosa del prestigio de su madre, revelaba su identidad a extra帽os, pero Nicole, la oficial de ciencias biol贸gicas de la inminente misi贸n espacial a Rama, prefer铆a el anonimato. A pesar de su inminente partida, una separaci贸n de cien d铆as para un encuentro con una nave alien铆gena, su hija mostraba una notable resiliencia, visualizando el viaje como una aventura y un proyecto escolar.
Mientras madre e hija se preparaban para la cena, un mensaje entregado en mano interrumpi贸 la tranquilidad. Un sobre con un escudo familiar desat贸 una oleada de recuerdos y nerviosismo en Nicole. Minti贸 a Genevieve sobre el contenido, afirmando que era un memor谩ndum confidencial de su trabajo, y r谩pidamente la envi贸 a ver a su abuelo, Pierre, para poder leerlo a solas. La nota, firmada por "Henry", la citaba para el mediod铆a del d铆a siguiente en un refugio en el Weissfluhjoch. El encuentro con Henry tra铆a a la memoria a Darren Higgins, quien le hab铆a entregado una invitaci贸n hace quince a帽os y medio.
A la ma帽ana siguiente, Nicole se uni贸 a la fila para el telef茅rico, reviviendo en su mente los recuerdos de su vida con Pierre y el nacimiento de Genevieve, un secreto que guard贸 de Henry hasta la coronaci贸n de este. Siete a帽os atr谩s, en el Palacio de Buckingham, Henry, ahora rey, vio en el rostro de la ni帽a un rasgo familiar que despert贸 sus sospechas, aunque Nicole no revel贸 nada. Ahora, en el refugio, despu茅s de una breve reuni贸n, Henry le entreg贸 un cubo de datos con expedientes de los miembros de su tripulaci贸n, advirtiendo sobre la inestabilidad de algunos. Aunque Nicole se sinti贸 ofendida por la intromisi贸n, la sinceridad de Henry la conmovi贸. Se despidieron, sin que 茅l supiera que Genevieve era su hija, mientras una voz interna le ped铆a a Nicole que le revelara la verdad, aunque su sabidur铆a le aconsej贸 guardar silencio. Ella simplemente dijo: "Adi贸s, Henry".
Las naves espaciales Newton y Rama se encontraban en el espacio, con el veh铆culo alien铆gena a la vista de la tripulaci贸n. Los cosmonautas Nicole des Jardins y Valeriy Borzov observaban la inmensidad de Rama, confirmando que su apariencia era id茅ntica a la de su predecesora. El comandante Borzov, al mando de la misi贸n, preparaba el acoplamiento y la exploraci贸n de la misteriosa nave, con la previsi贸n de iniciar las operaciones en poco m谩s de un d铆a.
Antes de proceder, Borzov solicit贸 a Nicole, una evaluaci贸n psicol贸gica completa de la tripulaci贸n. Nicole hab铆a preparado un informe de salud f铆sica, pero no esperaba tener que abordar la salud mental. Al final, confirm贸 que la tripulaci贸n estaba f铆sicamente en forma, salvo por algunas irregularidades hormonales en las mujeres. Sin embargo, en cuanto a la preparaci贸n psicol贸gica, se帽al贸 la tensi贸n y las discusiones recientes entre los miembros. Advirti贸 al comandante sobre el conflicto personal entre dos miembros, Wilson y Brown, sugiriendo que no se les asignara a la misma subunidad durante las misiones en Rama. Tambi茅n mencion贸 la dif铆cil relaci贸n de estos dos con Francesca Sabatini.
La rutina diaria de los cosmonautas inclu铆a el juego de ajedrez entre Janos Tabori y Takagishi. Nicole, mientras se dirig铆a a hacer ejercicio, los encontr贸 jugando y conoci贸 a las curiosas creaciones de Richard Wakefield: peque帽os robots que representaban personajes de Shakespeare. Estos robots, como "Bottom" y "Puck", se mov铆an, hablaban y actuaban escenas, sorprendiendo a Nicole con su ingenio y la pasi贸n de su creador.
M谩s tarde, Nicole, preocupada por su informe, se ejercit贸 m谩s de lo habitual. Al regresar a su habitaci贸n, descubri贸 a Francesca Sabatini en la sala de suministros m茅dicos, accediendo sin permiso al inventario de anticonceptivos. Nicole la confront贸 y le arrebat贸 una botella, descubriendo que conten铆a un abortivo. Francesca confes贸 que hab铆a quedado embarazada de forma no deseada por su ex pareja, Wilson, y que planeaba abortar por su cuenta. Nicole, en su papel de oficial m茅dica, insisti贸 en realizar un examen y confirmar el embarazo antes de autorizar el procedimiento. Francesca accedi贸 de mala gana y bebi贸 el l铆quido, poniendo fin a un embarazo no planeado de cinco d铆as.
La historia contin煤a con la tripulaci贸n de la nave Newton anclando con 茅xito cerca de la esclusa de aire de Rama II, la misteriosa nave espacial alien铆gena que replica a otra visitada setenta a帽os atr谩s. Dos cosmonautas, Wakefield y Tabori, son los primeros en entrar, siguiendo el mismo procedimiento que sus predecesores. Despliegan un sistema de transporte y montan una estaci贸n de comunicaciones, confirmando que el interior es id茅ntico al de Rama I.
Con todo preparado, se inicia el despliegue de drones para inspeccionar el interior. Las primeras im谩genes revelan una vista asombrosa: la Llanura Central, un vasto paisaje artificial con ciudades y valles. La tripulaci贸n se maravilla al reconocer lugares como Par铆s, Roma y Londres, nombres dados por los exploradores anteriores. El cient铆fico, David Brown, reacciona con euforia, celebrando la similitud con el primer Rama, mientras los dem谩s permanecen en silencio.
Los drones regresan con un resumen fotogr谩fico inicial, que confirma la ausencia de diferencias estructurales importantes. Esa noche, el general Borzov, el comandante de la misi贸n, anuncia la asignaci贸n de la primera misi贸n. Brown, al ver que no est谩 incluido, irrumpe furioso en la oficina de Borzov para exigir una explicaci贸n. El general se mantiene firme, record谩ndole su autoridad y revelando que su exclusi贸n se debe a su comportamiento de "prima donna" y a un informe de aptitud que desaconseja que trabaje con el Dr. Wilson. Brown, enfurecido, lo acusa de celos antes de retirarse.
M谩s tarde, en la cena de celebraci贸n, Brown no se presenta. La tripulaci贸n disfruta de un banquete mientras Francesca y el Dr. Takagishi proyectan en la pantalla una imagen exterior de Rama, que han coloreado y hecho parecer viva. Francesca recita el poema de William Blake, "El tigre", inspirando a la tripulaci贸n a reflexionar sobre la creaci贸n y los misteriosos constructores de la nave. La velada contin煤a con un antiguo ritual ruso de brindis, en el que dos personas, el general Borzov y Nicole des Jardins, comen gusanos de vodka como s铆mbolo de poderes especiales.
La noche concluye con una actuaci贸n de Lady Macbeth, interpretada por un robot en miniatura dise帽ado por Richard Wakefield. Nicole queda fascinada, pero el robot cambia de forma y adquiere los rasgos de Francesca. Esta transformaci贸n repentina la llena de un temor inexplicable, una premonici贸n de tragedia que la obliga a levantarse y regresar a su habitaci贸n, incapaz de sacudirse la sensaci贸n de p谩nico.
En un sue帽o angustiante, Nicole, revivi贸 una pesadilla de su infancia. El terror de ese sue帽o la sigui贸 al despertar, cuando un colega la alert贸 de una emergencia m茅dica. El general Borzov, comandante de la misi贸n, se encontraba en un estado de agon铆a, con s铆ntomas que suger铆an una apendicitis. La doctora, junto a su equipo, procedi贸 a diagnosticarlo, confirmando la alta probabilidad del cuadro cl铆nico. A pesar del dolor, el general insisti贸 en que se realizara la operaci贸n de inmediato, temiendo que la espera por una segunda opini贸n desde la Tierra pudiera agravar su condici贸n. Nicole, apoyada por la decisi贸n del comandante, decidi贸 operar a bordo con la ayuda de RoSur, un robot cirujano port谩til de alta tecnolog铆a.
Preparada para la intervenci贸n, la tripulaci贸n se reuni贸 en la enfermer铆a. El robot RoSur, una maravilla de la ingenier铆a a pesar de sus limitaciones, se despleg贸 y comenz贸 la operaci贸n bajo la supervisi贸n de Nicole y su asistente Janos. RoSur realiz贸 una incisi贸n con una precisi贸n y rapidez sobrehumanas. Sin embargo, en el momento crucial de la inspecci贸n, Nicole se dio cuenta de que el ap茅ndice de Borzov parec铆a sano. Justo cuando ella y Janos intentaron detener la operaci贸n, la nave experiment贸 una violenta sacudida. Nicole y su equipo fueron lanzados contra las paredes, y en el caos, la mano-escalpelo de RoSur continu贸 cortando, hiriendo fatalmente al general. A pesar de los esfuerzos de Nicole por detener la hemorragia, Borzov falleci贸.
El resto de la tripulaci贸n y los cient铆ficos en la Tierra se mostraron consternados por la muerte del general. Se report贸 como un tr谩gico accidente provocado por el movimiento inesperado de la nave alien铆gena, pero surgieron preguntas inc贸modas sobre la falla del sistema de seguridad del robot y la incapacidad del equipo m茅dico para reaccionar a tiempo. Nicole, atormentada por la culpa, se vio obligada a revisar los eventos una y otra vez. Se pregunt贸 si hab铆a cometido alg煤n error, si hab铆a sido negligente. No encontraba explicaci贸n para el fallo del robot, un sistema que hab铆a pasado rigurosas pruebas. Aunque los informes oficiales fueron presentados y Francesca, la periodista, fue justa en su reportaje, Nicole no pod铆a escapar de la devastadora conclusi贸n: un hombre hab铆a muerto bajo su cuidado y ella se sent铆a la 煤nica responsable.
Apenas un d铆a despu茅s de la muerte del general Borzov, la nave se sumi贸 en el caos. Nicole fue interrogada una y otra vez por la AEI, la agencia de control, quienes cuestionaron si su sobriedad hab铆a sido la causa de la tragedia, a pesar de que ella hab铆a explicado repetidamente que el consumo de alcohol no afect贸 sus capacidades. Decidida a descubrir la verdad, Nicole comenz贸 su propia investigaci贸n, centrada en por qu茅 el robot cirujano no hab铆a abortado la operaci贸n a pesar de que sus sensores hab铆an detectado anomal铆as.
Tras una ardua labor de cinco horas, Nicole descart贸 un fallo de hardware o software en el sistema del robot. Descubri贸 que la 煤nica explicaci贸n posible era que el software hab铆a sido alterado manualmente antes de la operaci贸n. Este hallazgo la dej贸 perpleja, ya que requer铆a conocimientos de programaci贸n avanzada que ella no pose铆a. Fue entonces cuando su deseo de exculparse la impuls贸 a continuar. Analiz贸 de nuevo los datos m茅dicos del general y descubri贸 algo sorprendente: si se descartaba la apendicitis, la causa m谩s probable de sus s铆ntomas era una reacci贸n a un medicamento.
Mientras tanto, en el vest铆bulo, los cosmonautas se reunieron para abordar el problema del liderazgo. El Dr. David Brown y el Almirante Otto Heilmann propusieron una estructura de mando dual, en la que ellos compartir铆an las responsabilidades. El plan fue respaldado por la mayor铆a, quienes sintieron que era necesario tomar el control en lugar de esperar una decisi贸n de la Tierra. Sin embargo, Reggie Wilson, con evidente frustraci贸n, se opuso a esta propuesta y nomin贸 al general Michael O'Toole como l铆der 煤nico. Aunque la mayor铆a apoyaba la idea de una estructura de mando compartida, Wilson insisti贸 en que O'Toole era el 煤nico l铆der capaz de inspirar confianza.
Fue entonces que el mismo general O'Toole se dirigi贸 a la tripulaci贸n. Argument贸 que una elecci贸n re帽ida ser铆a perjudicial para el equipo y confes贸 que 茅l mismo no se consideraba apto para liderar la exploraci贸n de Rama. Para sorpresa de todos, recomend贸 adoptar el plan de Heilmann y Brown para poder continuar con la misi贸n. Los cosmonautas aceptaron la recomendaci贸n. Despu茅s de la reuni贸n, Nicole se acerc贸 a Janos Tabori, quien se mostraba de mal humor. Nicole le pregunt贸 si recordaba haber manipulado el panel de control del robot antes de la sacudida de la nave. Janos, con el rostro inexpresivo, respondi贸 que no lo recordaba, atribuy茅ndolo al golpe que hab铆a recibido. Ante su reacci贸n y su falta de cooperaci贸n, Nicole concluy贸 que no hab铆a nada m谩s que pudiera aprender de 茅l.
Nicole se enfrenta a un fracaso profesional devastador a bordo de la nave Newton. Sola y abrumada, una videollamada con su familia revela que su verg眉enza ha trascendido el espacio, afectando profundamente a su hija, Genevieve. La pena de la adolescente se convierte en un espejo del dolor de Nicole, desencadenando una cascada de recuerdos dolorosos que la transportan al pasado.
El primer recuerdo que resurge es el de su juventud, cuando anhelaba interpretar a Juana de Arco. A pesar de su talento y dedicaci贸n, su piel morena fue el factor determinante para su descalificaci贸n, un fracaso que su padre la consol贸 como una muestra de la falta de preparaci贸n de la sociedad francesa. Este recuerdo la prepara para una p茅rdida a煤n mayor, el funeral de su madre, un ritual senoufo en Costa de Marfil. Aunque sumida en la tristeza, Nicole encuentra consuelo en la presencia de su padre, quien la acompa帽a durante la cremaci贸n, demostr谩ndole que el dolor compartido es m谩s f谩cil de sobrellevar.
Sin embargo, el recuerdo m谩s profundo y definitorio es el del Poro, un rito de iniciaci贸n tribal al que fue sometida con solo siete a帽os. A pesar de su terror infantil, su madre, Anawi, la entreg贸 a los sacerdotes del ritual, record谩ndole que era parte de su herencia africana. El ritual la separ贸 de su padre y la sumergi贸 en un mundo desconocido, lleno de extra帽os. En este viaje, Nicole tuvo que enfrentarse a sus miedos y a la incertidumbre. El ritual la puso a prueba de una forma 煤nica, oblig谩ndola a confiar en su propio ingenio y valent铆a. La noche de la iniciaci贸n, recibi贸 un kit de supervivencia, un acto que simbolizaba la autosuficiencia que se esperaba de ella. La prueba final la confront贸 con la elecci贸n de usar un tub茅rculo m铆stico que le dar铆a fuerza y visi贸n, a un gran costo emocional.
El relato entrelaza estos eventos del pasado con el presente, demostrando c贸mo las experiencias de la infancia han forjado a la mujer que es hoy. La soledad que siente en su nave no es nueva; es un eco de la soledad que sinti贸 durante el Poro. Su resiliencia, su capacidad para enfrentar la adversidad y su anhelo de conexi贸n son el resultado de estas pruebas. La historia de Nicole es una exploraci贸n de c贸mo el pasado moldea el futuro, y c贸mo los ritos de iniciaci贸n, ya sean antiguos o modernos, son pasos esenciales en el camino hacia la auto-realizaci贸n y el crecimiento. Nicole, no es solo una cirujana espacial, sino una mujer que ha sobrevivido a un pasado complejo, un rito que la prepar贸 para una vida de desaf铆os.
COMPLETADO